martes, 26 de abril de 2016

Los mitos en la alimentación

Es muy recomendable detenerse un poco a reflexionar sobre nuestra alimentación y nutrición. Pero a diferencia de lo que se suele pedir, esta vez pensemos en todo lo que se dice acerca de los alimentos: sus mitos y habladurías.

Sin duda, algunos de ellos tienen algo de cierto, pero el boca a boca ha hecho que lo que pudo comenzar como una experiencia de nuestros ancestros (y no tanto), se haya tegiversado hasta el punto de convertirse en un cuento propio de autores fantásticos y de ciencia ficción.
El boca a boca siempre ha sido y será muy poderoso y por tanto, peligroso. Estas historias van matizándose, llenándose de datos inventados a partir de suposiciones (o no) que hacen que la memoria colectiva de nuestra sociedad los dé por ciertos. Son los mitos sobre los alimentos, tan arraigados en nuestra cultura, y que damos por cierto simplemente por el hecho de que "todo el mundo lo sabe". Mitos como el de "las vitaminas que vuelan del zumo"; el orden en el que debemos tomar la leche y el zumo de naranja en el desayuno; maravillosos alimentos que hacen adelgazar, esas dietas antinaturales que adegalzan en días a base de melón, sandía o piña; lo malos que son los congelados; o que lo nervios engordan, son ya parte de nuestro "saber popular" y como si de un refrán se tratara, se lo escuchamos decir a nuestras abuelas, a nuestras madres y, claro está, se lo diremos a nuestros hijos.

Pero, ¿qué tienen de cierto?. Al inicio del párrafo anterior comentaba que algunos pueden tener algo de cierto. En mi opinión, estos mitos provienen en gran medida de la propia experiencia de nuestros antepasados (de no hace mucho)... y otros, más actuales, de la inexperiencia. Pongamos de ejemplo uno de estos mitos: el orden del zumo y la leche. Seguro que nuestros antepasados se dieron pronto cuenta que si mezclamos zumo de naranja con leche, esta se corta (es un ácido que desnaturaliza las proteínas de la leche, separando el suero de la parte sólida). También, seguro, se había observado que cuando se vomitaba después de haber ingerido leche, está estaba cortada (especialmente por el olor). Bastaría solo unir ambos sucesos (que en realidad tienen la misma causa) para lanzar una hipótesis: "si el zumo corta la leche, si se toma leche y después el zumo... se cortará (¿o era al revés?)". De cajón. Este hecho irrefutable era transmitido al entorno, y pronto convertido en una verdadera Ley: la ley del orden correcto de toma de leche y zumo. Al ser tan evidente, nadie pensó en lo que realmente ocurre en el estómago (la leche se cortará igualmente debido a los jugos estomacales), y en realidad, no importa ya que difícilmente podíamos convencer a nuestros abuelos de que el orden no importa, y que no pasa nada... la autosugestión les haría no aceptar la realidad.

Pienso que los mitos son consecuencia de esto, trasladar una información errónea (pero cierta para su emisor), que puede ser fácilmente explicada y que difunde como la pólvora, y esto, trasladado a nuestra sociedad actual (con whatsapp, televisión, facebook, etc.) donde una idea puede pasar en cuestión de minutos por miles de personas que la transformarán, le añadirán matices e incluso casos que pueden jurar conocen personalmente, es tremendamente peligroso. Y no nos olvidemos del sensacionalismo que pueden llevar asociados en algunos casos y que la prensa sesga para convertirlos en otra cosa que termina en bulo-mito (véase el último caso de las carnes rojas) De ahí que, como docentes, debamos pararnos un poco a reflexionar sobre los mismos, no estando de más comentar algunos casos a modo de cotilleo en nuestras calses para que, como la pólvora, podamos contrarrestar el daño que pueden llegar a hacer. Y digo daño, porque que levante la mano aquel que no se ha bebido el zumo casi atragantándose ante los gritos de nuestra madre de "bébetelo ya que se vuelan las vitaminas".


Y que conste que, aunque mitos son.... personalmente me encantan, porque forman parte ya de nuestra cultura.

miércoles, 23 de marzo de 2016

Recetas de buen provecho



Garbanzos al pimentón

Plato calórico pero muy sabroso que aprovecha los restos de los garbanzos del puchero y como alternativa a la ropa vieja (más contundente).

INGREDIENTES (para 3-4 personas)
·         Garbanzos sobrantes de un cocido previo (unos 400 gramos)
·         Cebolla mediana (½ grande)
·         1 tomate grande (1 y medio mediano)
·         1-2 dientes de ajo
·         2 cucharadas de aceite de oliva
·         Chorizo de cocinar
·         Cucharadita de pimentón rojo
·         ½ cucharadita de pimentón rojo picante (opcional)
·         Sal

Picar bien la cebolla y rehogar en una sartén con las 2 cucharadas de aceite. Cuando empiece a estar transparente (5 minutos aproximadamente), añadir el ajo bien picado. Añadir una pizca de sal.





Mientras termina de rehogar, quitar la piel al chorizo y cortar en daditos pequeños o tiras. Si se desmenuza, mejor. Pelar y cortar los tomates en dados pequeños quitando la simiente. Una vez rehogada la cebolla y el ajo, añadir el tomate. Se refríen y cuando comiencen a estar blandos se van aplastando. 





Añadir entonces los garbanzos del cocido y el chorizo picado.


Saltear durante unos minutos y dejar a fuego lento 10 minutos para mezclar sabores. Antes de servir, añadir el pimentón dulce (y el picante si se desea) y volver a saltear con cuidado de no quemar el pimentón debido a que coge sabor amargo.
Servir junto a un buen trozo de pan.
Bon appetit!!!!

 
Garbanzos al pimentón


PROCEDENCIA DE LA RECETA:
Variación de la receta Garbanzos refritos que podemos encontrar en el libro:
1080 RECETAS DE COCINA. Simone Ortega. Ed. Alianza Editorial.

Transformamos una receta

El gazpachuelo malagueño.... light

Pulsa para ver la infografía

martes, 8 de marzo de 2016

Cheeky food



Cheeky Food
EDAD:
Cualquier curso de secundaria (especialmente de 1º a 3º de ESO)

OBJETIVOS:
  1. Aprender la estructura de la pirámide alimenticia 
  2.  Conocer productos pertenecientes a los distintos grupos de la pirámide alimenticia 
  3.  Conocer la importancia de cada uno de los grupos por su consumo diario recomendado

MATERIAL
  • Bolsa de tela 
  •  39 fichas de póker / cartulinas tamaño tarjeta de crédito 
  •  Pegatinas o papel y pegamento 
  •  Ordenador e impresora 
  •  Cartulinas tamaño A4 de distintos colores (o de uno solo, opcional)

MONTAJE DEL JUEGO
Para poder jugar debemos primero montar nuestras fichas de juego. Por cada nivel de nuestra pirámide tendremos un número determinado de fichas (en función de la importancia de estos niveles para nuestra dieta). Nosotros tomaremos de ejemplo la pirámide siguiente:
Nivel 1: CEREALES, PASTAS, PATATA, ARROZ. Puramente energético y base de nuestra alimentación. >5 raciones diarias.
12 FICHAS DE JUEGO
 
Nivel 2: FRUTAS, VERDURAS Y HORTALIZAS. Función reguladora del organismo y aporte de vitaminas. +2-3 raciones diarias de verduras y/u hortalizas. +2-3 raciones diarias de frutas.

10 FICHAS DE JUEGO
 
Nivel 3: LÁCTEOS Y ACEITES. Aportan calcio, proteínas y lípidos. 2 raciones diarias lácteos. 3-4 raciones diarias de aceites

8 FICHAS DE JUEGO

Nivel 4: CARNES MAGRAS, PESCADO, HUEVOS Y LEGUMBRES. Aportan principalmente proteínas. 3-4 raciones semanales.


5 FICHAS DE JUEGO

Nivel 5: CARNES GRASAS Y EMBUTIDOS. Aportan principalmente proteínas y lípidos. Consumo moderado.


3 FICHAS DE JUEGO
  
Nivel 6: DULCES Y BEBIDAS AZUCARADAS. Aportan hidratos de carbono. Consumo ocasional.


1 FICHA DE JUEGO
  
Las imágenes de cada nivel se imprimirán en pegatinas y se pegarán en las fichas de póker. Otra alternativa es imprimir dichas imágenes en cartulina a un tamaño aproximado de tarjeta de crédito.
Con las cartulinas de colores haremos los tableros. Se imprimirá la estructura de la pirámide con sus huecos PERO SIN IMÁGENES. En lugar de las mismas, se pondrá el número correspondiente de fichas que puede albergar en cada nivel. Cada jugador/equipo contará con un tablero pirámide de un color (opcional, pueden ser todos iguales)



REGLAS DE JUEGO.
Se establecerá el orden de juego por el método que se estime necesario. Todas las fichas deben estar en la bolsa de tela (si se usan tarjetas, barajadas y en un montón boca abajo)

El objetivo del juego es completar la pirámide en las proporciones correctas con las distintas fichas de alimentos (será el número máximo de fichas a poner por nivel)

Cada jugador en su turno sacará una ficha de la bolsa. Para poder seguir sacando fichas, deberá decir un nombre de alimento relacionado con ese nivel. Si es correcto, tendrá dos opciones:
  •  Asegurar la ficha pasando el turno. Perderá el turno, pero podrá colocar su ficha en su tablero en el lugar que estime es su posición correcta. No pueden existir más fichas en una posición más allá de la marcada.
  • Coger una nueva ficha. La ficha obtenida anteriormente, queda encima de la mesa con el dibujo visible. Sacará entonces otra ficha de la bolsa. Si la ficha nueva es igual a la última obtenida, deberá devolver todas las que tenga en la mesa (no las del tablero). Si es distinta a la última obtenida, deberá proceder como al principio del turno (decir un alimento relacionado y decidir qué hacer de nuevo).
El jugador podrá continuar con su turno hasta que decida asegurar las fichas que tiene en la mesa y podrá sacar fichas mientras no salgan dos niveles seguidos. 

En el caso de no decir un alimento de forma correcta, o no decir ninguno, devolverá a la bolsa todas las fichas que tiene en la mesa (no las del tablero). NO ESTÁ PERMITIDO REPETIR UN ALIMENTO EN UN MISMO TURNO DE JUEGO. Si repite un alimento, devolverá todas las fichas a la bolsa (no las del tablero)
Cuando el jugador decide pasar el turno (asegurando sus fichas) o lo pierde, pasa el turno al siguiente jugador.

El juego finaliza cuando todas las fichas se han sacado de la bolsa o cuando un jugador completa su tablero.

MARCADOR
No necesariamente gana el juego que completa su tablero o saca la última ficha. Existe una regla de puntos para determinar el ganador.
  •  Por cada ficha colocada correctamente en el tablero: 2 puntos 
  •  Por cada nivel completado correctamente: puntos equivalentes al nivel completado. 
  •  Cada ficha mal colocada en el tablero: -2 puntos.
Gana el jugador/equipo que más puntos acumule.






JUEGO BASADO EN EL JUEGO DE MESA CHEEKY MONKEY

martes, 1 de marzo de 2016

Calculamos el valor nutricional de una receta



HUEVOS RELLENOS




INGREDIENTES (4 personas)/ALIMENTOS
-          6 Huevos tamaño “L”
-          2 latas de atún
-          1 cucharada de tomate frito
-          6-7 cucharadas de mayonesa
-          4 tiras de pimiento morrón/piquillo
-          4 aceitunas cortadas en mitad
-          Pizca de sal



GRUPOS DE ALIMENTOS Y VALORES NUTRICIONALES
Grupo 4. HUEVOS (unidad)
Proteínas
6.35 g
Carbohidratos
0.35 g
Lípidos
4.85 g
          Ácidos grasos saturados
1.4 g
          Ácidos grasos insaturados
3.45 g
          Colesterol
205 mg
Vitaminas
: 164.5 mg
          Liposolubles (retinol, b-caroteno, D, E, K)
125 mg
          Hidrolubles (tiamina, riboflavina, Niacina, ac. Fólico, B12, biotina, B5)
39.5 mg
Minerales
302 mg
Grupo 3. ATÚN EN LATA (100 g)
Proteínas
25.51 g
Lípidos
0.82 g
          Ac. Grasos saturados
0.234 g
          Ac. Grasos insaturados
0.496 g
          Colesterol
30 mg
Minerales (Na, K)
575 mg
 Grupo 7. PIMIENTO MORRÓN (DULCE) (100 g)
Proteína
1.19 g
Carbohidratos
5.2 g
Lípidos
0.4 g
          Ac. Grasos saturados
0.059 g
          Ac. Grasos insaturados
0.163 g
Fibra
1.5 g
Minerales (Na, K)
213 mg
Vitaminas (C, A, B3, B12)
91 mg
Grupo 7. TOMATE FRITO EN LATA (100 g)
Proteínas
1.5 g
          Ac. Grasos saturados
0.62 g
          Ac. Grasos insaturados
4.4 g
Carbohidratos
5.2 g
Fibra
1.6 g
Vitaminas (destaca la vitamina C)
20 mg
Minerales (Cl, Mg, Na, P, K, Fe, Zn)
1.5 g
Grupo 9. MAYONESA (supondremos casera de huevo y aceite girasol) (100 g)
Proteínas
6.35 g
Carbohidratos
0.35 g
Lípidos
99.9 g
          Ácidos grasos saturados
1.4 g
          Ácidos grasos insaturados
3.45 g
          Colesterol
205 mg
Vitaminas
: 164.5 mg
          Liposolubles (retinol, b-caroteno, D, E, K)
125 mg
          Hidrolubles (tiamina, riboflavina, Niacina, ac. Fólico, B12, biotina, B5)
39.5 mg
Minerales
302 mg
Grupo 8. ACEITUNAS VERDES (100 g)
Proteínas
1.1 g
Lípidos
16.3 g
          Ácidos grasos saturados
3.23 g
          Ácidos grasos insaturados
12.4 g
          Colesterol
0.2 mg
Fibra
2.6 g
Minerales (Na, Ca, P, K, Mg)
589 mg